Urgen ya medidas drásticas
Hace mucho tiempo que tengo claro que la calidad personal y profesional del vestuario del Valencia se ha ido empobreciendo, a la par que de calidad deportiva. Lo segundo por las deudas. Lo primero porque se ha puesto el acento muy poco en investigar la persona además del futbolista. “Te engaña la persona; no te engaña el futbolista”. Me lo dijo García Pitarch hace mucho tiempo. Y en el vestuario del Valencia: Guaita, Rami, Mathieu, Feghouli, Parejo o Banega son perfiles de riesgo.
De Guaita solo le conozco la gambada de irse de discoteca a Oliva (sin profundizar en lo que allí pasó ) la noche después de perder con partido feo en Cornellá. Pero de los otros cinco, hay para contar muchas que no han sido objeto de contundencia, si no de sanciones sin dureza. Y después de tantos bochornos (rajes, borracheras, conducir sin carnet..) es hora de hacer raya y pegar puñetazo en la mesa. Se impone una decisión ejemplar, un despido, para que se instale el respeto donde hoy luce el libertinaje. Rami puede pagar los platos rotos, pero es que o esto se corta pronto o en vez de salir en el AS, el Valencia terminará saliendo en El Jueves.