Jorge aprieta pero Marc aguanta

Muchos dábamos por muerto al Rey, pero su majestad Lorenzo no está dispuesto a regalar el título así como así. En San Marino ha ganado en un pispás, en dos vueltas, pero el Mundial lo tiene muy cuesta arriba. Sólo tiene una oportunidad, que Márquez falle y no puntúe en una de las cinco carreras que restan. Quedan en juego 125 puntos, por lo que Marc, si queda segundo, aunque Lorenzo gane todo, el de Repsol sería campeón. El gran perjudicado será Pedrosa. Lo lógico es que esta misma semana alguien le comunique que pasa a ser segundo piloto y que debe trabajar para Márquez. También puede suceder que nadie lo haga, Honda no lo suele hacer. O que Dani no lo acepte porque tienen las mismas opciones que Lorenzo. Ojala sea así, sin órdenes.

El balón está en el tejado de Shuhei Nakamoto, jefazo de HRC. Imagino lo que sufrió este hombre con el soberbio duelo que nos obsequiaron Marc y Dani. Dos vueltas fantásticas en las que Márquez dejó extenuado a su ángel de la guarda. Suerte que su rival era Pedrosa, noble donde los haya. Ser así es parte de la magia de Marc. Tira y tira sin mirar estrategias ni tácticas. Honda y Yamaha (¡a buenas horas mangas verdes!), por fin están igualadas. Márquez tiene las matemáticas y la estadística a su favor. Lorenzo, su experiencia y la inexperiencia de Marc. Rossi también le ayudará. Pedrosa, que el año pasado ganó en Aragón, Malaisia, Japón y Valencia. También le salen los números. Más ingredientes, imposible, y encima todos españoles.