Un gran espectáculo
La subida al Angliru no nos deparó ninguna sorpresa. Los dos hombres más fuertes de la carrera han demostrado por qué han sido lo mejores en esta Vuelta. Horner ha sido el justo ganador y a su vez vimos a un Nibali muy ambicioso, que nos brindó un ciclismo del bueno. Hasta en cinco ocasiones atacó el Tiburón en una subida tan exigente como el coloso asturiano. Y durante estos ataques el americano demostró correr con una gran sangre fría, controlando la carrera. Me recordó a las tácticas que utilizaba Indurain: se desentendía de los ataques que le lanzaban, se centraba en su ritmo y tiraba para arriba.
A los nuestros, tanto a Purito como a Valverde, les ha pesado el calendario tan cargado que llevaban y les ha pasado factura la dureza de esta Vuelta. Y aun así se han codeado con los mejores de la carrera, Valverde ha hecho podio y Purito se llevó la etapa del Naranco. La entrega y lucha de los corredores han estado a la altura. Ahora espero que esta dureza de la carrera española no les pase factura a los nuestros en el Mundial de Florencia. Valverde es uno de los favoritos al Mundial y creo que el equipo que lleva el seleccionador está hecho para él. Da igual que te llames Purito, Samuel o Alberto Contador.