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La Selección tiene que ser valiente

Nos buscarán los defectos. Grecia buscará provocar que España pueda perder el partido entre malas decisiones tomadas en ataque estático, pérdidas de balón y fallos en los tiros de media y larga distancia. Intentarán ir más allá y tratarán de ser ellos quienes seleccionan los tiros de España con su defensa, restándoles lanzamientos a nuestros jugadores más fiables. La valentía y el atrevimiento de nuestros jugadores referenciales serán imprescindibles.

Puntos en transición. Uno de los factores más ventajosos para España en su partido de hoy contra Grecia será el de poder conseguir puntos al contraataque. El conjunto heleno cuidará su transición defensiva tras tiros fallados, por lo que será de gran ayuda la capacidad de provocar recuperaciones por parte de la primera línea defensiva de España. Es indudable que tener a Marc Gasol un metro por detrás permite asumir riesgos que jugadores como Ricky, Rudy, Sergio Rodríguez, Llull y San Emeterio están preparados para desempeñar.

La inversión de cantera. Los resultados de las selecciones absolutas suelen dar respuesta al trabajo realizado en divisiones inferiores durante años, al presupuesto invertido y al cariño puesto en la creación de jugadores. España, siempre compitiendo en categorías de formación, ha visto como en los últimos años Italia ha vuelto a aparecer con equipos de nivel en esos campeonatos, todo un reflejo. Y, curiosamente, quien parece estar desapareciendo de la élite de la cantera europea es Rusia. Una paradoja si tenemos en cuenta la voluntad de mejora y la reivindicación baloncestística-patriótica de otras antiguas repúblicas soviéticas como Letonia, Georgia y Ucrania.

Haciendo de malo. Durante la disputa ayer del Letonia-Ucrania el árbitro canario Juan Carlos Arteaga tuvo la difícil papeleta de echar del centro de la pista al grupo de cheerleaders de las Red Foxes (Zorras Rojas) cuando ya habían empezado a bailar. Creyeron que había tiempo muerto cuando en realidad sólo se trataba de unas sustituciones y el partido tenía que continuar. Luego, Arteaga le señaló una técnica por protestar al seleccionador letón Ainars Bagatskis, cuando su equipo estaba 33 puntos arriba en el marcador, al inicio del último cuarto. Sin concesiones.