Cicloturistas en la Vuelta

Por la Vuelta se está dejando ver un grupo de cicloturistas aficionados. Son australianos, van perfectamente uniformados y disfrutan de privilegios tales como recorrer los últimos kilómetros de la etapa, incluso cruzar la meta antes de que lleguen los corredores. Hacen turismo como cicloturistas. Un turismo de clase alta -el paquete que se vende como Vuelta a España cuesta 2.275 euros-, que les permite meterse en la Vuelta y visitar los alrededores de donde pasa. Esta es una muestra de las posibilidades que ofrece el deporte, que bien gestionado permite obtener unos recursos notables. La Federación Española de Hípica también tiene un interesante plan de turismo ecuestre por recorridos especialmente habilitados para ello.

Se trata de explotar las posibilidades que ofrece el deporte, no como espectáculo sino como actividad. Es cuestión de echarle imaginación y ganas. Son muchos los deportes donde los espectadores no pagan por presenciarlos, pero son también muchos cuyos practicantes están dispuestos a pagar por realizarlos si reciben una oferta interesante. En España puede encontrarse un clima excelente todo el año, somos un país que es referente en el deporte gracias a nuestros muchos y variados campeones, la infraestructura turística es extraordinaria... Tenemos todas las condiciones para atraer un turismo deportivo. La Vuelta comienza a sacar provecho de ello. El deporte vende, pero hay que saber venderlo.