Un púgil para avivar las ascuas
El pasado fin de semana, la España del boxeo miró hacia EE UU. Hacia Chicago, donde Gabriel Campillo siguió codeándose con la élite y a Atlantic City, donde Kiko Martínez se metió entre los elegidos. Los dos pertenecen a MaravillaBox, la promotora que Sergio Maravilla Martínez fundó hace un par de años. El argentino afincado en Madrid, campeón del medio y púgil-estrella, vivió antes que ellos la difícil papeleta de entrenarse en España e intentar ser alguien en esto. Y sabe que el dinero y la gloria no están aquí ahora. Con sus contactos y jugándose su capital está consiguiendo que sus mejores boxeadores tengan oportunidades. Dentro de poco, Iván Ruiz también optará al Europeo en Bélgica. Hay que agradecérselo.
Pero Maravilla también organiza veladas en España. Como Rimerbox y Barceló, o Tundra, o Gallego Prada, o Guantes de Lobo Y cuesta mucho cubrir gastos. Los alquileres son caros, algunos ayuntamientos ponen trabas, la Ley del Menor impide las emisiones entre las 06:00 y las 22:00 horas con un celo de protección que no se aplica a otros contenidos La cantera y la afición se va segando, pues, de raíz. Por eso es importante que haya nombres que tiren del carro. Gente como Kiko que devuelva el boxeo a las pantallas y anime al público. El reto sería lograr que hiciera una defensa en España, un gran show. Este es un deporte sacrificado como el que más, crudo pero lleno de respeto y al que le hacen falta estos chispazos para volver a arder. Porque hay ascuas.