La tarde en que Coe batió a Ovett

La que ustedes ven es la foto de las fotos del atletismo en los Juegos Olímpicos de Moscú 1980. Sebastian Coe se impone al alemán oriental Jürgen Straub y al también inglés Steve Ovett, compatriota y sin embargo enemigo. Yo estaba allí. En la grada, y cojo. Había sido seleccionado para competir en el relevo 4x400 metros (segunda posta) pero una contractura en el primer entrenamiento en Moscú me dejó fuera de combate.

La carrera se celebró el 1 de agosto de ese 1980, en el Estadio Lenin, ahora llamado Luzhniki, entonces cementoso, triste e inmenso. Llegué a la pista apresurado y renqueante, porque el viejo autobús militar que nos transportaba desde la lejana Villa Olímpica marchaba con retraso. Justo cuando entré al estadio sonaba el disparo. 

La rivalidad entre los británicos trascendía lo deportivo: ni se hablaban. En su edificio de la Villa vivían en los lugares más alejados posibles. Ovett había vencido en los 800 metros el 26 de julio, con Seb Coe segundo, pero este ganó en el kilómetro y medio, pocos días después. El mundo al revés, porque Steve era favorito en 1.500 y Sebastian en las dos vueltas a la pista.

Recuerdo que nos bailaban las piernas viendo aquella carrera magnífica. No teníamos favoritos entre los dos ingleses. Ambos nos caían bien: Coe, clásico y conservador; Ovett, contestatario y casi libertario. Eran dos genios en la pista. Y yo estaba allí. Cojo, eso sí.