La marcha de Pepe Reina confirma que el Liverpool ya no es grande de Europa
Otro que se va. La salida de Pepe Reina dice más sobre el Liverpool que sobre el jugador. Este es uno de los clubes más grandes y con más historia de Europa que ya no forma parte de la élite y que poco a poco se ha ido desprendiendo de los mejores jugadores. La fuga de cerebros de Anfield comenzó en 2009 cuando Xabi Alonso se marchó al Real Madrid.Desde entonces, el Liverpool ha perdido a Mascherano (Barcelona) y a Torres (Chelsea). Reina sigue esa tendencia, aunque a diferencia de los otros, él no quiere irse. Reina es una víctima de las circunstancias, de la caída de Liverpool y de las medidas desesperadas que tiene que tomar el club para volver a ser competitivo.
Elevado sueldo. Los comentarios sobre su rendimiento han sido enormemente exagerados, pues aunque durante 18 meses su forma no estuvo a la altura, en la segunda mitad de la temporada pasada Reina ya alcanzó su mejor nivel. ¿Por qué el Liverpool le permite irse a Nápoles cedido? Básicamente porque creen que se le paga demasiado a un portero que juega en un equipo que no está en Champions. Hace tres años, cuando Reina renovó su contrato, el Liverpool creía que podía permitirse el lujo de pagarle alrededor de 110.000 euros por semana porque esperaban volver a Champions. Eso no ha sucedido y su contrato se ha convertido en una carga financiera.
A la Champions. A principios de este verano, parecía que la situación iba a ser fácil de resolver. El Barcelona quería a Reina para reemplazar a Víctor Valdés, un cambio que Reina tenía ganas de que se llevara a cabo y que al Liverpool le habría hecho feliz. Pero Valdés sigue en el Barça y Liverpool siguió con un problema que ha resuelto con la cesión al Nápoles, que señala el comienzo del fin de Reina en Anfield. Reina se va a un mejor equipo, con más posibilidades de éxito y que le ofrecerá la oportunidad de jugar la Liga de Campeones. Estará de nuevo al nivel que le corresponde. Pierde el Liverpool y gana el Nápoles.
Menos Arsenal. Arsene Wenger tiene una pesadilla peor: que Cesc Fàbregas fiche por el Manchester United. Perder a Fàbregas fue un golpe muy duro para Wenger, sólo superado cuando Van Persie se marchó al United, porque el Arsenal no tenía la ambición ni el poder económico para competir con mayor éxito. Hay posibilidades de que Cesc vuelva al fútbol inglés, pero no al Arsenal sino al United, lo que es mucho peor. Eso reforzaría el mensaje de Van Persie de que el Arsenal no está capacitado para competir al más alto nivel. Una acusación más condenatoria del Arsenal de Wenger es difícil de imaginar.