Bourousis, un fichaje acertado
El Madrid ha fichado a Bourousis, un pívot consistente y contrastado. Al menos mucho más de los que han desfilado por la plantilla en los últimos tiempos, y han sido unos cuantos. Casi a razón de uno por temporada, cuando no dos. Pívots de diversos cortes, pero ninguno convincente. Unos dejaron la impresión de que no dieron cuanto tenían; otros llegaron limitados, y los hubo incluso sobrevalorados. El caso es que ninguno echó raíces, y tampoco a nadie se le echó de menos al irse. Bien que ha pagado el Madrid esta carencia, porque se ha visto en inferioridad de condiciones al enfrentarse a equipos con pívots cuajados. Uno de estos equipos fue el Olympiacos de Bourousis. Siete veces jugó contra él, y cinco veces que perdió.
Hubo un partido significativo. Fue en 2009, y los 25 puntos que metió Bourousis en el cuarto partido de los playoff de la Euroliga resultaron determinantes para la eliminación del Madrid. Ese día se convirtió en una de las bestias negras de los madridistas. Dos años después volvió a romper la defensa del Madrid con 16 puntos en 22 minutos. La pasada temporada, ya como jugador del Milán, perdió los dos enfrentamientos que tuvo, pero hay que tener en consideración el potencial de uno y otro equipo en los que jugó. Ahora, con este fichaje, ganan los dos: el Madrid compensa el cinco con un pívot implacable en defensa y eficaz en ataque, y el jugador vuelve a verse rodeado de compañeros de primer nivel. Si no hay sorpresas, ha sido un buen fichaje.