El eslabón perdido, la leyenda de Luis Suárez y ‘Las Quereda’

El eslabón perdido. La salida de Thiago es algo más que la mera venta de un futbolista. Algo está cambiando en el Barça. La falta de minutos, la estela de Guardiola y el atractivo del Bayern campeón no se han contrarrestado. El mayor de los Alcántara puede convertirse en el eslabón perdido en la cadena evolutiva de La Masía. Guardiola jugaba, Xavi esperó, Thiago no mantiene la cadencia. Y Cesc: oferta de 30 millones del United y del nuevo proyecto Moyes. Fichados Valera y Garay para la defensa, la negativa de Thiago y las dudas de Rooney fuera de la gira asiática por lesión, se necesita un refuerzo ilusionante. Pensábamos que Fàbregas había comprado el billete de vuelta a casa, no que podía ser de ida y vuelta a la Premier.

Goles belgas. Origen en el Congo y nacionalidad belga. Dos delanteros internacionales en la Premier y la continua coincidencia en el camino. Benteke y Lukaku. Hace una semana que Benteke solicitó el transfer request, la vía amistosa para salir del Aston Villa e ir a Londres, al Tottenham, no al Chelsea. Una elección que da la oportunidad a Lukaku de evitar una nueva cesión tras la del West Brom. “Allí me hice hombre”, dijo, con 17 goles y 5 asistencias. Tiene la pretemporada para convencer a Mou.

Españoles en el calcio. Cincuenta y pico años después del Inter de Luis Suárez no sólo no ha habido otro Balón de Oro español, sino que uno tras otro buenos jugadores se desdibujaban al llegar a la Serie A. Valero inició el cambio de tendencia. Esta temporada también serán viola Joaquín y Marcos Alonso. Conte prueba en la Juve un 3-3-4 con Tévez y Llorente. En Nápoles, Benítez se reencuentra con Albiol y suman a Callejón. Desde que los Prandelli, Montella o Conte muestran que otro fútbol es posible en Italia, las distancias han menguado. Ojalá, las comparaciones con El arquitecto, así llamaba Di Stéfano a Suárez, sean para bien y no para mal. Medio siglo después, va siendo hora.

Las Quereda. La Selección juega de nuevo. La de las chicas, sí. La que dirige Nacho Quereda y trata de meterse en cuartos del Europeo, torneo al que no se acudía desde el 97. El empate con Rusia, en el grupo más fuerte, vale. “¿Por qué no se televisa fútbol femenino? Bueno, puedo entenderlo”, dijo el seleccionador entre reivindicación y resignación. El trabajo, la entrega y los retos son los mismos fuera del foco mediático. Saben que la atención se mantiene en grandes citas y victorias. Lo dicho, mañana juega España.