El reto de Pol, cuestión de cabeza
Comparto la opinión de Pol, como protagonista, y de Márquez, como observador. Creo que, por supuesto, el menor de los Espargaró puede recuperar su déficit de puntos respecto a Scott Redding, el líder provisional del Mundial de Moto2. Sin desmerecer en absoluto al británico, diría que el español ha demostrado a lo largo de su trayectoria deportiva mucha más solvencia en todo tipo de situaciones, empezando porque fue el único capaz de apretarle las clavijas realmente a Márquez el pasado año en su camino hacia el título de la clase media. Pol estuvo en 2012 a un grandísimo nivel, así que lo sorprendente ha sido su arranque de temporada tan discreto, cuando tenía todo de cara para ser el favorito indiscutible a heredar la corona de Marc.
Puede que esa presión, diría que más propia que ajena, haya jugado en contra de Espargaró, además de ciertos problemas con su moto que parecen en camino de resolverse. La clave de la remontada está en su cabeza, en su mentalidad, en su confianza... Si Pol se reencuentra a sí mismo y tiene fe en todo su potencial, Redding y los demás tendrán que aplicarse a fondo para pararle los pies. En Montmeló ya vimos una primera aproximación a su mejor versión, así que ahora el reto de Assen puede resultar determinante. No es la holandesa una pista en la que atesore precisamente grandes resultados, pero si quiere luchar por ese título mundial no le queda otra que empezar a recuperar con firmeza lo que ha cedido hasta este momento.