Pirelli se coloca en el ojo del huracán
Noticias relacionadas
Esto del ‘Pirelligate’ no me gusta nada. Como cualquier otro lío de reglamento y politiqueo en la Fórmula 1. Me entusiasman las carreras, no las intrigas de despacho. El deporte no debería verse adulterado por situaciones como ésta, sólo que parece inevitable que ocurra. El caso que nos ocupa desprende un hedor que invita a pensar que alguien va a salir muy mal parado. Y si tuviera que hacer un pronóstico a medio plazo, más allá de la decisión que hará pública hoy el Tribunal Internacional, diría que el principal damnificado va a ser Pirelli. Es más, me atrevo a pensar que la brecha que se ha abierto entre el proveedor de neumáticos y la FIA es demasiado profunda para que la conciliación sea posible a corto plazo…. y justo cuando toca la renovación de su contrato.
Siendo cierto que Pirelli no es un concursante de la Fórmula 1 y desde esa perspectiva quedaría fuera de autoridad deportiva de la FIA, la realidad es que las acusaciones tan directas que han realizado contra el suministrador de neumáticos son clarificadoras respecto al estado de la relación entre ambas partes. Parece evidente que nadie ataca de ese modo a un socio tan importante y cercano si su intención es que la sociedad siga adelante. Y en Pirelli, obviamente, se están dando cuenta del percal y se sienten vapuleados y perseguidos, al margen de los efectos nocivos que para la imagen de una empresa tiene un escándalo de estas características y magnitud. Es muy probable que Mercedes reciba hoy algún tipo de sanción, pero me parece mucho más preocupante el futuro de la marca italiana en los grandes premios. Pronto saldremos de dudas…




