P. P. San MartínCesc supo mezclar bien con SoldadoActualizado a 17 de junio de 2013 02:44 CESTDel Bosque apostó por Soldado como delantero centro puro, pero también metió a Cesc unos metros por detrás. Es decir, esta vez La Roja jugó con nueve y con 'falso' nueve y el experimento salió más que bien. Además, Del Bosque apostó por jugar con un único pivote, en ausencia de Xabi Alonso, y todo funcionó a la perfección. Cesc y Soldado fueron la prolongación perfecta de las ideas maravillosas de Iniesta y Xavi, amén de alimentarse de dos jugadores eléctricos y atrevidos como fueron Pedro y Jordi Alba, este en sus prolongaciones por la banda izquierda. La sinfonía de toque, con apoyos, idas y venidas, redondeó una posesión que dejó en evidencia a Uruguay y a su técnico, Tabárez, que no tuvo futbolistas para plantar batalla. La única respuesta posible fue a balón parado, cuando Luis Suárez asomó con un golazo de falta que maquilló el bailecito al que fue sometida Uruguay hasta el 87'.Etiquetado en:Cesc FabregasRoberto SoldadoSelección española fútbolSelección Fútbol UruguayCopa ConfederacionesSelección españolaFútbolSelecciones deportivasCompeticionesDeportes