Un himno del Madrid para un culé

Carlos Espinosa de los Monteros definió la Marca España como: "La imagen que transmitimos como país, pueblo o sociedad. La percepción que tienen los demás". Aunque esa percepción, añado yo, a veces pueda ser engañosa. Voy con un ejemplo real que sucedió ayer en el Foro 2014-AS. Mientras el Alto Comisionado respondía a una pregunta de Juan de Dios Román, sonó a todo trapo un teléfono con el himno del Real Madrid. El primer pensamiento que tuvimos algunos fue: 'A Tomás Roncero se le ha olvidado silenciar el móvil'. Pero de repente vimos levantarse apurado a José Ramón Beorlegui. Primera percepción, fallida. La segunda conclusión, más fácil, era: 'Este señor es aficionado madridista'. Pues tampoco. Resulta que un amigo le había enviado un mensaje de broma con el tono madridista. Beorlegui es seguidor del Barça.

Las percepciones pueden ser también así de revoltosas. Cuando un país enlaza un triunfo tras otro, lo normal es despertar un torrente de admiración en el exterior. Pero existen otras percepciones. Por ejemplo: los Guiñoles de Canal+ Francia. Ellos aluden a esa Operación Puerto mal resuelta como la causa de los éxitos. Y no son los únicos. Es otra cara de la misma realidad, una mancha para la Marca España.