Superar los condicionantes de Montecarlo

Llega el GP de Mónaco, el más especial de todo el año. La verdad es que se trata de un escenario excepcional, con todos los ingredientes para disfrutar de carreras también únicas. Sin embargo, da la impresión de que no se presenta demasiado propicio para los intereses de Alonso, obligado a hacer de nuevo magia en la calificación para no verse relegado en la parrilla de salida. Algo que, visto lo visto hasta el momento, se antoja complicado porque su Ferrari funciona mejor en ritmo de carrera que en las prestaciones puras que exige una vuelta rápida. No es menos cierto que las particularidades de ese trazado en las calles del Principado dejan algo más de margen a la genialidad de un piloto como el asturiano, pero ni siquiera manejando esta variable parece sencillo verle en la pole del domingo.

Y ya sabemos lo que ocurre a partir de ese instante. Adelantar en Montecarlo es casi una misión imposible, al menos cargada de enormes riesgos, así que la opción de la remontada es más remota que en cualquier otro lugar. Si Alonso no se ve muy retrasado en la parrilla seguro que habrá esperanza, porque de su talento siempre se puede esperar todo; pero si ocurre como, por ejemplo, en Montmeló donde salió quinto, la cosa se pondrá bastante cuesta arriba… y sería una lástima. Estamos en el momento justo, como ha comentado el propio piloto, de que el aspirante le aseste un buen golpe a la moral del campeón; que Alonso le vaya recortando puntos a Vettel en esta fase del campeonato sería fundamental porque es ahora cuando en Red Bull pueden tener más dudas sobre la continuidad de su hegemonía. Así que ya saben, este sábado más que nunca habrá que estar muy pendientes de la tele desde las dos de la tarde…