Kaká se deja aún más crédito en Cornellà
La primera parte dejó la definitiva noticia de que Kaká sigue perdiendo crédito, si es que le queda algo. El brasileño fue invisible como mediapunta, lento de reacciones, blando en la pelea y escaso de recursos para enlazar en ataque. A tanto llegó esa alarmante nulidad en la primera parte, que el Real Madrid sólo disparó dos veces a portería: una vez Morata y otra Di María. El Espanyol se sintió muy cómodo ante el encefalograma plano de los blancos, donde apenas Modric despuntó apareciendo en la red medular periquita.
Morata, nada; Di María, tampoco; Higuaín, pelea... Triste imagen del Madrid hasta el descanso y mejora evidente cuando entraron Benzema y después Cristiano por Kaká. Llegó el empate y más tono ofensivo, al que el Espanyol respondió con fuerza para llevarse el punto.
En Cornellà muchos jugadores se dejaron un porcentaje de su crédito, pero sobre todos, defraudó el afligido Kaká.