El Carrusel de Aritz
Pepe se baja del barco de Mourinho
La tormenta que ha provocado Mourinho en el Madrid también empapa el hasta ahora hermético vestuario blanco. El portugués luce un eslogan propagandístico entre sus fieles que empieza a ser papel mojado: “Nunca oirás a un jugador hablar mal de él”, decían. “El vestuario está con Mou”, razonaban. “Los futbolistas le apoyan”, concluían. Pero no. El narcisismo mourinhista sufrió un duro revés al escuchar a Pepe defendiendo en público a Casillas de las acusaciones de su técnico. Ni la conexión entre compatriotas salva ya a un entrenador que perdió su particular batalla contra el mundo. Eso, o que para Pepe no es difícil ser portugués y vivir en España. Como para la gran mayoría.
La figura de la madre en todo este negocio
Sus madres les limpiaron las botas, les despertaron para que llegaran a tiempo a los partidos, les prepararon copiosos desayunos con los que rendir luego sobre el campo. Sus madres les obligaron a hacer los deberes, les dijeron lo que valían cuando las cosas no iban bien, les aplaudieron en cualquier campo y ante cualquier enfurecida afición. Sus madres les animaron ante las lesiones, les contuvieron frente a los éxitos, les educaron como personas para que así pudieran ser futbolistas. Y como a ellos a todos nosotros, en cualquier ámbito, en cualquier sector. El tributo en Vigo de los jugadores del Athletic a la madre se reflejó luciendo su apellido en las camisetas. Qué menos. Y qué bonito.
Tello: el impulso necesario cuando no está Messi
El Barça habla un idioma con Messi y otro sin él. La cuestión es saber si el causante de este desentendimiento es el Barça o el propio Messi, por lo vulnerable que parece el uno sin él y lo majestuoso que es el otro cuando surge. En medio de la incomunicación asoma la figura de Tello, que volvió a dar una velocidad al juego del Barça de la que adoleció frente al Bayern. La del canterano es una solución que Tito debió valorar más en Champions, pues no fue convocado ni para la ida ni para la vuelta. Y es que el Barça es un equipo acostumbrado al sonido de la flauta travesera de Xavi, pero necesita cambios de ritmo. Si no, tiende a caer en la somnolencia. Sin Messi, las opciones de alcanzar esa aceleración se reducen a Tello. Ya no es una promesa del B. Ya es una necesidad.
Los movimientos que Álvaro ya se conoce
El sueño de la permanencia sobrevuela La Romareda tan a última hora como de costumbre. El éxito de Jiménez pasará por la experiencia de jugadores con cada vez más horas de vuelo en Primera, entre ellos el central Álvaro González. El de Potes llegó en verano del Racing y se ha convertido en una pieza fundamental en el eje de la zaga. Normal. Es curioso lo suyo, pues comenzó como delantero y ha terminado por ser un gran central. En el Liébana, antes de llegar al Racing, era el máximo goleador de su equipo, pero en Santander dio un paso atrás que ahora confirma en Zaragoza. Por eso los movimientos de los rivales le suenan. Eran los suyos. Los de delantero.
El fútbol corre por la sangre de Saúl
Al Atlético se le agota la gasolina esta temporada al mismo tiempo que de su cantera salen jóvenes a los que confiar el futuro. Es el caso de Óliver, menuda joya. De Manquillo. También de Saúl. El mediocentro dispuso de minutos sueltos en Riazor como ya había tenido hace dos semanas en Sevilla y más asiduamente en la Europa League. Y casi siempre para bien. Da gusto comprobar la madurez de un joven que sirve de guinda para una familia que vive por y para el fútbol. El padre —Boria— jugó en el Elche y de su matrimonio con Pilar surgieron tres hijos, tres varones, tres futbolistas. El mayor, Jony, titular en Segunda con el Guadalajara; el mediano, Aarón, recién llegado al Elche del Almería, también en Segunda; y el pequeño, Saúl, que aparece con cada vez más frecuencia por el primer equipo atlético de la mano de Simeone. No es para menos. Tiene personalidad, carácter, llegada, empaque. Tiene todo lo que necesita su equipo para terminar con entereza la temporada. Tiene aquello que desde siempre mamó en casa: fútbol.
Detalles que hacen grande un club
Un club no lo hacen grande su presupuesto ni sus modernas instalaciones. Bastan los detalles. Y el que tuvo el Sevilla con Perotti ha sido importante. Una hernia discal dio origen a la espiral de lesiones que truncó su prometedora carrera. Las recaidas fueron constantes. Primero físicas, después psicológicas. Tal fue la impotencia de Diego que llegó a poner su sueldo a disposición del club. Ese no era el Perotti que todos esperaban de él. Pero el Sevilla no aceptó, le dejó en manos del cuerpo médico y le permitió viajar a Argentina a seguir con su recuperación. El resultado es su vuelta a los campos, ayer de nuevo como titular. Paciencia y cariño. Bastaba con eso.
La cláusula 'antimiedo' encuentra pagadores
La cláusula del miedo es aquella por la que un cedido no puede jugar contra el equipo poseedor de sus derechos. Cada vez es más común en nuestra Liga, por ilógica que resulte. Si un jugador no vale para un club, tampoco debería ser temido como rival. Esa es la teoría, aunque no se cumple. Por eso el Granada tendrá que pagar 100.000 euros por utilizar a Recio ante el Málaga, club al que pertenece. No sé recuerda caso igual en los últimos años. Y es que pocos se pueden permitir el lujo de saltarse una condición así, más en los tiempos que corren. El Granada lo hizo con Recio y la estrategia funcionó. Son 100.000 euros, pero son tres puntos. Bien pagados están.
Arizmendi y el gafe de los futbolistas
El fútbol es inflexible cuando las cosas se tuercen. Si algo puede salir mal, sale mal. Que se lo pregunten al Mallorca. El conjunto bermellón se dejó dos puntos fundamentales ante el Levante y quizá la esperanza para siempre de poder salvarse. El culmen del infortunio fue la lesión de Arizmendi al minuto y medio de estar sobre el campo. El madrileño entró como revulsivo y en su primera intervención se fue en camilla tras chocar con Juanfran. La mala suerte sí existe en el deporte, a diferencia de lo que se piensa. También en el fútbol. Y si hubiera que ponerle un nombre y una cara saldrían los de Arizmendi. De internacional en su día a eterno gafe. Demasiado injusto.
Djukic: muy buen gusto
Djukic es de esos técnicos jóvenes y atrevidos que piden paso. El Valladolid perdió en el Bernabéu pero lo hizo dejando una grata impresión. Lo normal en estos escenarios suele ser caer, pero se puede hacer jugando al fútbol. Así hizo el Pucela.
Malos tiempos para Barkero
La polémica persigue al Levante desde que Barkero insinuase que no ve a algunos de sus compañeros al cien por cien en este tramo final. Ayer, el zurdo fue el centro de todas las miradas al pedir el cambio a los 28 minutos. Pero sí, había lesión.
Beñat se quedó en el banquillo
Beñat había sido titular en todos los partidos que había disputado en la Liga, pero ayer se quedó en el banquillo de manera sorprendente en el Camp Nou. Los técnicos siguen haciendo rotaciones dirigidas cuando hay un grande enfrente. Ayer fue Mel.
Osasuna continúa en caída libre. Su derrota en Valencia complicó también el próximo partido ante el Getafe, pues cayó goleado y además acabó con nueve jugadores.
Falcao lució unas botas rosas con burbujas como diseño. Definitivamente las marcas deportivas han confundido la innovación con lo hortera. Se pierde la esencia.