El Liverpool está dispuesto a pagar diez millones por Xabi

Pareja. En el Liverpool, los que mandan tienen un sueño: juntar de nuevo a Gerrard con Xabi Alonso. Brendan Rodgers quiere renovar el contrato del inglés un par de años más, pese a que cumplirá 33 en mayo y que le queda una temporada al acabar ésta. Con la jubilación de Carragher (fichado por Sky Sports como comentarista), Gerrard se convierte en el veterano, el ejemplo a seguir. Y un buen atractivo para el regreso del tolosarra. El Liverpool estaría dispuesto a pagar 10 millones por Xabi este verano. La pregunta que debe hacerse Xabi es, ¿tiene sentido luchar contra el recuerdo de un Xabi más joven, aunque con menos títulos o experiencia? ¿Fueron segundas partes buenas? ¿Para qué volver como jugador si su leyenda podría ayudarle a ser entrenador del Liverpool en un futuro? La afición no parará hasta intentar convencerle del regreso a ‘su casa’.

Racismo. Situación delicada para la federación inglesa: se dice que en el encuentro ante San Marino, un grupo de aficionados ingleses entonaron cánticos insultantes hacia Rio Ferdinand y su hermano Anton. Quizá incluso racistas, dicen periodistas que estuvieron presentes. Pero no hay una grabación que lo demuestre. La federación no quiere dar la impresión de debilidad ante abusos racistas, pero, sin tener pruebas, no quieren caer en la fácil tentación de reaccionar de un modo histérico. Rio, que no estuvo en el partido y habla de oídas, ya ha acusado a su propia hinchada de racista. El caso es que, si las investigaciones de la FA confirman los cánticos, Inglaterra (que sufre un rebrote de sucesos políticamente poco correctos) podría ser castigada por FIFA a jugar su próximo partido contra Moldavia en un estadio vacío. La federación querría también que cesaran los cánticos más habituales anti-IRA habituales en partidos de la selección y en manifestaciones de extrema derecha.

Pérdidas. Las deudas en el fútbol inglés son de las más importantes del mundo (unos 400 millones de euros en pérdidas la temporada pasada), pero dos bancos que cuentan con propiedad estatal financian a algunos. El Liverpool, Fulham y West Ham tienen el respaldo del RBS y de Lloyds. Los clubes han pedido préstamos a ambos y no son los únicos que deben dinero a dos instituciones financieras que fueron recientemente rescatadas por el Estado. Es decir, los contribuyentes (del United, del Tottenham, del Arsenal) ayudan a pagar los salarios y traspasos de sus rivales. El RBS pertenece en un 81% al Estado y Lloyds recibió unos 30.000 millones de euros en ayudas estatales en la última crisis bancaria. De momento, los más críticos no piden el cese de esos préstamos, pero sí que los bancos pongan el mismo interés en empresas menos populares.