Pues no es un invento español...
Muy esclarecedor es el resultado de la encuesta entre los periodistas especializados (algunos de ellos entre los más prestigiosos de la Fórmula 1) sobre su pronóstico para el Mundial. Que Alonso sea considerado el mejor piloto y el favorito al título, mientras que su Ferrari sigue sin ser el más competitivo de la parrilla, desmonta la teoría del patrioterismo que a menudo se atribuye a la Prensa española en torno a la figura del asturiano. Confiar y apostar por él desde este lado de la frontera parece lo más sencillo o lo políticamente correcto, cuando tan sólo se trata de una constatación del descomunal talento de un piloto que, cosas de la vida, es de los nuestros...
Alonso ha sido siempre un pilotazo, desde que competía en los karts. Pero con el paso del tiempo, con la experiencia y el aprendizaje ha llegado, como era previsible, a un punto de madurez que le coloca como uno de los grandes de este deporte y de todos los tiempos. Ignorar tal evidencia es un acto de mezquindad e ignorancia que no se sustenta de forma alguna y el reconocimiento internacional del que disfruta es sólo un dato más, aunque de peso, al respecto. Porque no lo decimos sólo aquí.