Los chicos del barrio

Los cracks. Normalmente suele ser Falcao el que se lleva los elogios. O Arda Turan. Jugadores fichados a golpe de talonario, futbolistas de referencia mundial. Pero un equipo (y más con el Cholo Simeone en el banquillo) está formado también por otro tipo de futbolistas, menos mediáticos, pero brillantes porque tienen calidad para ello. El Atlético ganó gracias al trabajo y al empeño de todos, pero brillaron dos chicos de barrio, Koke y Diego Costa. El primero es de Vallecas, zona obrera, y el viernes recibió el cariño de su gente, de los que le conocieron desde niño ('Koke y los del barrio' se llama la peña). El otro es Diego Costa, futbolista que jugó en la calle hasta los 16 años. Él mismo ha reconocido que llegó muy tarde al fútbol profesional. Le costó, pero está en la élite. De ahí quizá todas sus virtudes y también algunos de sus errores. Los chicos del barrio ganaron y el Atlético se llevó los tres puntos de un feudo complicado como es El Sadar.

Lesión. Me imagino hoy a Maroto pendiente de la lesión de Diego Costa y llamando a Del Bosque para comentarle la evolución de la lesión del brasileño. Al seleccionador le gusta mucho el jugador del Atlético, pero Diego Costa, pese a su esguince de tobillo, viajará a Suiza para jugar con Brasil. Otro hubiera salido ante Osasuna a pasearse ante la posibilidad de su vida de jugar... con Brasil. Pero no Diego Costa. Otro hubiera pensado en sus intereses particulares y no en los de su equipo. Con el 0-1 y lesionado, otro se hubiera marchado del campo. Pero no Diego Costa. Por eso es imprescindible para el Cholo y por eso es un jugador tan querido por la afición rojiblanca. Lleva ya 15 goles en la temporada (seis en Liga, siete en Copa y dos en Europa League). Casi nada. Koke lleva ocho asistencias. Desde la campaña 2008-09 no había un jugador del Atlético que tuviera tantas. Forlán llevaba nueve. Jugadores así son los que interesan a los clubes. Ayer Diego Costa fue el de siempre: intenso, guerrillero, combativo, pero recibió mucha dureza que se quedó sin castigo. Al noventa y cinco por ciento de técnicos de Primera le gustaría tenerle.

Pelea. El Atlético corrió igual o más que Osasuna. Metió igual o más la pierna que Osasuna. La diferencia la puso la calidad. El Atlético ha encontrado un filón con el Cholo. Pasarse por un entrenamiento del argentino es comprobar que los jugadores van a tope en los ensayos. Y como se entrena se juega.

50 partidos. Ganó el Atlético y lo hizo donde no es sencillo hacerlo. Es la tercera victoria consecutiva rojiblanca en El Sadar, que puede ser territorio hostil para otros, pero no para el equipo madrileño. El Cholo llegó a su partido 50 en Primera con el conjunto del Manzanares y su balance es de 29 victorias, 10 empates y 11 derrotas. Sólo Zamora, Marcel Domingo y Antic tienen mejores números en esos 50 encuentros.

La Champions. Por televisión hubo algunos momentos que la camiseta tan oscura del Atlético se confundió con la de Osasuna. En el juego no fue igual. Tras la derrota ante la Real, el equipo recupera la senda del triunfo y la Champions está encaminada. Me imagino cómo disfrutó el equipo alevín del Atlético de Fede Bahón que sufrió un percance al volver de Burriana (Castellón). Su autobús se incendió en la carretera ante el susto de los niños. Volvieron junto al Canillas escuchando los goles rojiblancos. Y es que no hay obstáculo para el Atlético.