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Giggs, confidencias tras una gran decepción en la Champions

Desde dentro. Ryan Giggs ha explicado abiertamente lo que sintió y vivió en los días y horas previos al partido en Old Trafford ante el Real Madrid. Sus palabras nos llevan dentro del vestuario más hermético del mundo, el del Manchester United.

Relajado. "Antes del encuentro tenía la cabeza muy estimulada pero me sentía relajado. Tenía la duda, tras el 1-1 por ver qué podía pasar. Estaba tenso pero lo justo. El entrenador me dijo, 'No vas a jugar ante el Norwich' y me imaginé que me iba a poner ante el Madrid. Cuando me comunicó eso empecé a prepararme con su asistente y el preparador físico. Tenía claro lo que necesitaba pero lo confirmé con ellos. Entrené con el equipo el viernes, el sábado sólo corrí 45 minutos. El domingo, bici y estiramientos".

Sorpresa. "Hacía mucho tiempo que no me sentí del modo que lo hice tras el encuentro. Nos salió todo tan bien, conseguimos que el Madrid pareciera poca cosa. Un partido europeo de los de verdad. El entrenador siempre nos dice, 'cuidado porque en Europa el techo se nos puede caer encima'. Y eso fue lo que ocurrió (con la expulsión de Nani). Nunca experimenté una sorpresa como la que tuve al ver la roja".

Ruido. "No puedes culpar a los jugadores, la táctica... Me puse a animar al público, no lo había hecho nunca antes. Era rabia y la búsqueda de una reacción. Había ruido de noche especial en Old Trafford y acabas haciendo cosas que no planeabas. Al acabar, el vestuario estaba en silencio. Quise decirles, intentemos ahora ganar la FA Cup, pero ni eso pareció adecuado en ese momento. Me quedé sentado diez minutos callado. Después de partidos europeos, no duermo en toda la noche. Al día siguiente no dije nada a nadie. Le tienes que dar al equipo un par de días para superarlo".

Recuperación. "Me preparé para un partido grande, desde lo que comí a lo que descansé, y físicamente y psicológicamente no me he recuperado aún. Eso es lo que más notas cuando pasas de los 30 (tiene 39), me cuesta recuperarme cuatro o cinco días. Dos días después de un encuentro así no hago nada: un poco de bici, unos estiramientos, yoga y un baño de hielo. El segundo día, 20 minutos de bici y unas carreras, ocho en total de portería a portería y ya está".