La Roja puede con este Brasil. Esa es la reflexión a bote pronto cuando lees la primera lista de Luis Felipe Scolari. La convocatoria está repleta de jugadorazos, veteranos y noveles, pero el resultadista entrenador brasileño tiene trabajo por delante para configurar un equipo capaz de ganar a los actuales campeones de Europa y del mundo. Scolari es un técnico para el corto plazo. La Confederación Brasileña de Fútbol le ha fichado para conseguir ganar la Copa Confederaciones este verano y ser campeón del mundo en 2014 como lo fue en 2002.

La CBF siempre vuelve a sus técnicos campeones como hizo con Zagallo y Parreira, campeones y creadores desde el banquillo del mítico Brasil del 70, que regresaron en el 94 para que Brasil fuera campeona del mundo 24 años después. Ahora ha vuelto a nombrar Scolari, flanqueado por Parreira, para que Felipao logre su segundo mundial después del que ganó en 2002. Para ganar su sexto mundial, y como locales, superando el traumático Maracanazo de 1950, los brasileños deben ganar a España. La meta de La Roja es ganar a Brasil y en Brasil. El próximo mes de junio y en 2014. Es el gran aliciente. Y agrandar la leyenda.