A sus 25 años, Khedira atraviesa su mejor etapa como jugador del Madrid. Su sangre tunecina le ha aportado más descaro en sus llegadas al ataque, algo a lo que nos tuvo poco acostumbrados en sus dos primeros cursos en el Bernabéu. El Khedira de Alemania es llegador, poderoso en sus irrupciones en el área enemiga, atrevido y hasta poseedor de algo de pegada. ¿Recuerdan su golazo de volea a Grecia en la Eurocopa? Aquí le habíamos visto sólo como 4x4 con misiones puramente defensivas. Pero Mourinho le ha reubicado más arriba, dejando la manija en exclusiva a Xabi Alonso. A todos nos gusta más este Khedira. Llegador (¡golazo de tacón a la Real el Día de Reyes!) y combinativo (Sami ya lleva cuatro asistencias).

La fiabilidad alemana de Khedira es la que debe desplegar esta noche el Madrid en Mestalla. El 0-5 fue un golpe al hígado del orgullo valencianista, pero hay que salir sin confianzas y con humildad. Un gol acabaría con el debate: Iker no va a encajar cuatro. Pero lo importante es contener las primeras acometidas de orgullo de los hombres de Valverde (¡ojo a Valdez!) y enviar balones a Cristiano y a Di María para que sellen el paso a semifinales. Eliminar al Valencia con autoridad elevará la autoestima de este equipazo.