El F2012 tiene salud de hierro
En Singapur, Vettel hizo de Hamilton y Lewis emuló a Sebastian en Monza. Los dos han sumado dos ceros y veinticinco puntos en ambas carreras mientras que Alonso, tercero en ellas, ha añadido treinta. Puede saber a poco estos cinco puntillos, pero el F2012 no da para más. McLaren y Red Bull son superiores y sólo la calidad de Fernando, con el auxilio de la suerte, está evitando un buen trompazo. Pero tras Monza y Singapur por fin hemos encontrado una virtud a este monoplaza: su resistencia. Ya era hora que Stefano Domenicali pudiera compartir méritos con Alonso. Si en las seis carreras que quedan el RB8 y el MP4-26 se averían al ritmo de las dos últimas pruebas y Alonso queda tercero, el Mundial será para el asturiano por 59 puntos de ventaja.
Y si se repiten los resultados de 2011, también. El año pasado, Fernando no ganó ninguna de las carreras que quedan (EE UU no se celebró), por dos Vettel y una Hamilton, Webber y Button. Hizo dos segundos, un tercero, un cuarto y un quinto, 73 puntos que le permitirían sacar diecinueve de ventaja a Vettel a igualdad de resultados. Es decir, que lo único que no puede permitirse el asturiano es no puntuar en una carrera, por lo que la solidez del F2012 pasa a ser clave en este tramo final. El otro riesgo que queda es la labor de equipo. Vettel tiene de escudero a Webber y Hamilton a Button, mientras que Alonso tiene a Massa. El australiano y el inglés pueden restar muchos puntos al líder del Mundial, pero el brasileño, si no cambia el chip, me temo que no.