La gloria está en Atenas
Hoy es el día más importante de la historia del Málaga. Por muchos motivos. Porque está en juego la supervivencia económica del club (salvo que Al-Thani abandone su postura de no invertir más). Por el prestigio futbolístico que concede jugar la Champions. Porque algunos de los fichajes que hay pendientes dependen de volverse de Atenas con la clasificación bajo el brazo. Y porque se evitaría la venta de alguno de los pilares de la plantilla. La afición de Málaga se merece el regalo de la Champions. La pretemporada ha sido de órdago, repleta de incertidumbre y con un tremendo vacío de poder.
Cualquier elogio hacia plantilla y cuerpo técnico se queda corto. No habrá premio sin sufrimiento. Atenas siempre es caliente y Jesualdo Ferreira ha retado a su gente a llenar el estadio. No será fácil pese al 2-0. Pero a este Málaga le sobra orgullo. En eso tiene cierto parecido con aquel equipo que eliminó al AEK en la UEFA 2002/03. Esta noche, Pellegrini y sus futbolistas tienen ante sí el reto de escribir la página más brillante de la historia del club. El Málaga es un sentimiento. Volveré.