El Atlético cumplió con los deberes, pero las torpezas ante Betis y, sobre todo Real Sociedad, anuncian un verano más que movido por el Calderón. No hay Champions, pero seguro que Vallecas se tiene que sentir más colchonera que nunca. Falcao se quiso despedir por la puerta grande marcando el gol de la victoria, ya que según su propio consejero delegado, sin Champions era prácticamente imposible retener a las estrellas. Ahora llegará otra penitencia atlética. Nuevos traspasos de los mejores para paliar deuda y el enfado de una afición que se siente entusiasmada con este equipo del Cholo, que le ha dado otro título europeo. La Liga es el torneo de la regularidad y los colchoneros han pinchado justo contra los rivales más asequibles.

Como muestra vale un botón: los cinco puntos que se dejaron ante los verdiblancos de Pepe Mel han sido definitivos. Por desgracia nuevamente la actualidad pasará a los despachos. Salvo el milagro de que llegue un sponsor dadivoso o que aparezca un jeque generoso o llegue un fondo de inversión de los países del este con ganas de gastarse el dinero, no parece probable que los rojiblancos puedan volver a disfrutar de Falcao. Que, sin duda, es el mejor goleador que hay en el mundo.