Otro tiro al poste de Freire

He de confesar que no he podido ver en directo la Amstel Gold Race porque a esas horas estaba encerrado en un avión volviendo de un viaje. Eso sí, lo segundo que he hecho nada más aterrizar en Madrid (lo primero, si me lo permiten, fue telefonear a mi mujer) ha sido informarme del desenlace de la ‘Clásica Cervecera”. Este año tenía la corazonada de que el ciclismo español podía por fin ingresar en su palmarés. Por cantidad y calidad: Purito Rodríguez (2º en 2011), Valverde (3º en 2008), Samuel Sánchez, Óscar Freire, Dani Moreno…

Me equivoqué; el triunfo tendrá que esperar. Pero en lo que no me falló la intuición fue en que los españoles iban a ser animadores de la carrera. El turno le volvió a tocar a Freire, que sumó su enésimo tiro al poste de esta temporada en clásicas: 2º en el E3 Prijs Harelbeke y la Flecha del Brabante; 4º en la Gante-Wevelgem y en esta Amstel Gold Race, y 7º en la Milán-San Remo. En este 2012, con 36 años, el triple campeón del mundo lleva dos victorias parciales (etapas en Down Under y Andalucía), pero le está faltando rematar en este tipo de carreras, sus favoritas, aunque sí está exhibiendo una regularidad y un rendimiento brillantes.

En esta edición de la Amstel, Freire ha tenido además la capacidad de reinventarse. A pesar de ser un reconocido llegador, el cántabro lo intentó con un ataque largo a 9 kilómetros, porque sabe que desde que se incorporó el Cauberg como final de clásica en 2003, sus opciones disminuyen en un cuerpo a cuerpo en el repechón. Óscar ha estado valiente, aunque al final ha sido cazado a menos de cien metros para la meta. El vencedor fue el italiano Enrico Gasparotto, acompañado en el podio por el belga Jelle Vanendert y el eslovaco Peter Sagan. Freire ha entrado cuarto, seguramente tomando apuntes para el Mundial, que se celebrará en estas mismas carreteras.

Más de uno habrá resoplado en el Rabobank cuando Freire ha sido cazado, porque la clásica holandesa es la más importante para este equipo, que el año pasado decidió no renovar el contrato a Óscar. Hubiera sido irónico, incluso divertido, que el de Torrelavega hubiera vencido con su nuevo maillot del Katusha donde nunca lo pudo hacer con el del Rabobank, que prefería apostar por sus 'líderes' holandeses. El equipo ruso le abrió las puertas y no ha errado. Freire ha anunciado que 2012 será su última temporada, salvo que conquiste el Mundial, pero, sinceramente, me resulta muy difícil verle fuera del pelotón con estos resultados y con tantos puntos UCI en la saca, con lo mucho que se cotizan actualmente. Me parece que vamos a tener Freire para un año más… O si no, al tiempo.

VUELTA A CASTILLA Y LEÓN. En España se ha celebrado esta semana la Vuelta a Castilla y León, que ha quedado reducida a tres etapas debido a la crisis. La victoria final ha sido para Javi Moreno, del Movistar, que en la última jornada aprovechó el mayor poderío de su equipo para desbancar de la general a Luis León Sánchez, vencedor el sábado en Ávila. Este triunfo tiene un significado muy especial para el Movistar, porque aquí logró Xavier Tondo su última victoria antes de su fatal accidente: de ahí que Javi Moreno apuntara al cielo en el podio. Las dos etapas restantes se las adjudicó el Caja Rural, que ha estrenado así su casillero anual de victorias: la primera para el portugués Manuel Cardoso, en Salamanca, y la tercera para el panameño Yelmo Gómez, en Segovia.

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