Ferrari sigue sin estar a la altura

La temporada ha comenzado con un gran premio muy bonito, que nos ha dejado lecturas para todos los gustos. La primera es que Jenson Button es el piloto con la cabeza mejor amueblada de la F-1. Cuando gana parece hacerlo sin esfuerzo, lo hace todo muy fácil, como por ejemplo el adelantamiento a Hamilton en la primera curva, clave para ganar la carrera en plan paseo. La segunda es que el McLaren MP4-27 es el monoplaza más equilibrado y competitivo de la parrilla, aunque no tan superior al Red Bull RB8 como todos pensábamos tras los entrenamientos del sábado. Y la tercera, que Vettel es un grandísimo piloto que, pese a quedar segundo, sigue siendo el gran favorito para ganar este Mundial (fantástico su adelantamiento a Rosberg por fuera en las primeras vueltas).

Pero quien se merece una mención especial en este GP es Fernando Alonso. Salió el doce y acabó quinto con un coche que se asemeja más a un penco que a un 'Cavallino'. Condujo al límite durante 58 vueltas y todo pinta a que o mejoran muchísimo el F2012 o va a ser muy difícil que supere esta posición. Respecto a Felipe Massa, mejor no detallar lo que hizo en Australia, pero no está en condiciones de conducir un Ferrari, como Domenicali de dirigir el equipo. A Webber con Red Bull le puede llegar a pasar algo parecido. ¡Qué horror de salidas! Tirón de orejas para Mercedes, el equipo que más me ha decepcionado en Melbourne, y mención de oro para Pérez, Sauber, Maldonado (gran noticia ver otra vez ahí a Williams), Raikkonen, Kobayashi y Ricciardo.