El lockout multiplicó el talento
El lockout fue un problema para la NBA y una bendición para la NCAA. La incertidumbre hizo que muchas de las estrellas universitarias de 2011 decidieran quedarse un año más en la facultad. Así, jugadores como Sullinger, Barnes o los Jones (Perry y Terrence) que hubieran estado en el Top-10 del draft, volverán a buscar el título este año antes de dar el salto, ahora sí, a profesionales. Si les sumamos la llegada de una de una deslumbrante generación de jugadores de instituto, nos encontramos ante el Gran Baile con más estrellas en años.
A los clásicos les gusta recordar que aquí no importan los nombres ni el futuro NBA, sino la camiseta, los entrenadores y la enloquecida hinchada que arrastra cada uno. Y es cierto. Porque la sorpresa es que no haya sorpresas, el colectivo a menudo engulle al individuo y la emoción anula los continuos errores. Y está bien así, pero contar con tanto joven abocado a la grandeza nunca puede ser un problema. En fin, que cada uno escoja bando. Los puristas a Michigan State o Syracuse, bloques sin figuras. Los NBAdictos a Kentucky o North Carolina, plétora de futuras estrellas. Hay para todos. Disfruten.