El Villarato de Alfredo Relaño
Querido Alfredo Relaño. Me consta que las últimas horas han sido especialmente felices para ti y para todos aquellos que formáis parte de la gran familia de AS. El exdirectivo de Joan Laporta, Godall, ha confirmado vuestras informaciones de manera demoledora. Con sus declaraciones ha manchado la imagen del Barça para proteger a su amigo Joan. Fue a por Rosell, pero lo hizo sin valorar las consecuencias.
Mala campaña. La debilidad del actual presidente es palpable y los directivos de Laporta han aprovechado las últimas meteduras de pata de la actual Junta para montar una campaña que les ha salido mal, muy mal. Decir que el Barça supo sacarle partido a su buena relación con el poder y que el distanciamiento actual del club azulgrana con respecto a Villar y a la Federación le puede pasar factura con los árbitros es una afi rmación de una enorme gravedad.
El Villarato. El gran ganador de la metedura de pata de Godall eres tú, Alfredo. Acuñaste el término "Villarato" para referirte a los desmanes de un personaje que siempre se ha manejado bien en los despachos y que ha sabido devolver los favores de manera adecuada. Me fastidia que te hayan dado la razón. Me mosquea que la conclusión de todo esto sea que hay que estar al lado del poderoso para ganar. Tu lucha ha dado frutos. La tuya, la de Roncero, Pedro Pablo, Colino, la de Damián González, en su caso refi riéndose al fl ujo de poder...
Los hilos del fútbol. El compañero de pupitre de Laporta en el colegio, Godall, ha conseguido restarle magia y brillantez al trabajo de Guardiola, al trabajo impecable de Guardiola durante los últimos años. Gracias al exvicepresidente del Barcelona podemos llegar a la conclusión de que para ganar hay que estar al lado de los que mandan, de los que designan a los árbitros y que así se maneja nuestro fútbol. Confi rmaría lo que tú has venido repitiendo tantas veces y que yo me negaba a aceptar.
Quiero seguir creyendo. Felicidades a ti, Alfredo, a los lectores de AS y a todos aquellos que habéis denunciado la manera de actuar de la Federación durante tanto tiempo pero yo, y a pesar de lo que diga Godall, seguiré creyendo en la honestidad de los árbitros y en la limpieza de la competición. Continuaré pensando que los mejores, al final, siempre ganan. La confi rmación del "Villarato" es una buena noticia para el periodismo pero una muy mala noticia para nuestro fútbol... Y Punto Pelota.