Un sevillista caldea el ambiente
El Sporting afronta una semana especial, con la necesidad de ganar al Sevilla, debido a su complicada situación en la clasificación. La mareona se moviliza y lleva camino de llenar El Molinón, al que se le dotará de un ambiente especial Está en proceso de organización una espectacular marcha desde San Pedro y un monumental tifo rojo y blanco, que adornará todas las gradas y tribunas del campo rojiblanco. Casi todo el sportinguismo rema en una misma dirección por una causa, que no es otra que la permanencia. Y para eso hay que ganar partidos. El primero, el del Sevilla. ¿Están todos en la misma sintonía? No. El sevillano y sevillista José María González de Caldas, con un paquete accionarial en el Sporting, sacó los pies del tiesto en la semana más inoportuna.
El arquitecto hispalense anunció en Onda Cero que en el club "suceden cosas raras" que dará a conocer en su momento, aunque, por otro lado, se queja de desconocer cómo funciona una entidad en la que dice tener casi tanto capital como el del máximo accionista. Si es así y no le hacen caso, tiene razón en lamentar que le toman el pelo, aunque nunca se le vio en una junta de accionistas para ponerse al día. De eso no tienen la culpa José Fernández, principal accionista, ni los consejeros. Anunciar que va a decir, pero sin decir y admitiendo que no se entera sólo son ganas de desestabilizar. Tal vez la explicación sea el sevillismo de corazón que confiesa González de Caldas, con un sportinguismo de cartera, sin que nunca se le hayan hecho caso a sus recomendaciones de fichajes.