Valverde y Cobo se presentan con aroma a Tour de Francia
Cualquier acto que gire en torno al actual Movistar siempre desprende un cierto aroma a Tour de Francia. Es inevitable. No hay que olvidar que los orígenes de este equipo están en aquel Reynolds de los años 80, de Ángel Arroyo y Pedro Delgado, y en aquel Banesto de los 90, con Miguel Indurain. Ha llovido bastante desde entonces, pero la Grande Boucle sigue siendo un referente para esta escuadra. Por eso no es de extrañar que durante la presentación de sus dos grandes fichajes para la temporada 2012, Alejandro Valverde y Juanjo Cobo, volviera a sobrevolar la palabra Tour.
El Movistar arrancó en 2010 sin un gran líder en sus filas. “Fue un año para crear y asentar las bases”, dijo el mánager, Eusebio Unzué. Esta temporada se suplirá esa carencia con una doble capitanía: Valverde y Cobo. El murciano empezará fuerte la sesión para intentar lucir en las clásicas de las Árdenas, luego disputará el Tour y dejará la puerta abierta de la Vuelta, aunque su presencia no es segura. El cántabro, por su parte, arrancará despacio para alcanzar su primer pico de forma en Francia y para defender su dorsal número uno en la ronda española.
A priori, la Grande Boucle será la única carrera donde la pareja coincidirá en todo su esplendor. Y lo hará con altas aspiraciones. “No descarto el Tour, aunque haya estado mucho tiempo parado”, dijo Valverde durante el acto. “Aspiro a lo máximo sin renunciar a nada”, apuntó Cobo. El propio Unzué también destacó la candidatura del murciano… Y lo hizo con una alusión al vigente campeón: “Cadel Evans ha demostrado su constancia y ha recogido los frutos con 34 años. Valverde tiene que reencontrarse primero, pero le puede servir el mismo ejemplo. En el kilómetro cero del Tour va a ser uno de los favoritos. En realidad, en esta carrera sólo le ha faltado suerte, pero creo que puede pelear por todo”.
Valverde ha tenido siempre el Tour entre ceja y ceja, como tantísimos ciclistas. Eso ha provocado algunas críticas de muchos aficionados que siempre le han visto otro perfil de corredor: más clasicómano, al estilo Jalabert. Alejandro, que ya tiene en su palmarés la Lieja-Bastoña-Lieja (dos veces), la Flecha Valona y San Sebastián, tampoco descarta estas carreras. Al contrario, serán su primer objetivo del año. “Vamos a intentar ponérselo difícil a Philippe Gilbert”, dijo sobre el actual dominador de las clásicas, a la par que destacó a Peter Sagan como “otro rival muy peligroso”.
En mi opinión, es cierto que las cualidades de Valverde (al menos del Valverde de antes de la sanción) se ciñen más a las clásicas o a las grandes carreras de una semana. Pero también entiendo que el calendario es amplio y abre múltiples posibilidades. Alejandro ya ha ganado una Vuelta a España y ha sido sexto en un Tour. Hasta ahora le ha faltado un puntito para poder luchar realmente codo a codo con los gallos de la ronda francesa, pero me parece lícito que lo siga intentando si se siente con ilusión para ello, sin que ello sea óbice para que todos estemos deseando presenciar esos pulsos con Gilbert en las Árdenas.