El Hamburgo volvió a ganar en su campo
Por fin un respiro. El Hamburgo obtuvo su primera victoria en el cuarto partido de liga a las órdenes de Thorsten Fink. El 2-0 sobre el Hoffenheim fue también la primera victoria en casa desde hace ocho meses. Frank Arnesen, manager del club histórico, parece haber recuperado la confianza una vez fuera de los puestos de descenso: "Si seguimos jugando así, subiremos puestos".
Contratiempo. La derrota que el Bayern (0-1) sufrió en casa frente al Dortmund puso en evidencia que la ausencia del lesionado Schweinsteiger resulta decisiva para el equipo. Heynckes eligió a Kroos como sustituto, pero el futbolista de 21 años se vio superado por la tarea. La vuelta de Robben tras una baja de siete semanas tampoco sirvió para impulsar el juego.
Árbitro en apuros. El árbitro Markus Wingenbach desató las iras del público en el turbulento Friburgo-Hertha (2-2). Le negó un posible penalti al Friburgo y le anuló dos goles. Los aficionados no se conformaron con insultarle, también le lanzaron vasos de plástico con cerveza. Las imágenes de televisión demostraron que el árbitro tenía razón.
Última oportunidad. Al Dortmund no le queda otra que ganar en Champions al Arsenal si quiere mantener una mínima esperanza. Götze y compañía son terceros del Grupo F, tres puntos detrás del Olympique de Marsella y a cuatro del Arsenal. El campeón germano recibirá a los franceses el 6 de diciembre en el último partido de la fase de grupos.