El plan de futuro está decidido
El clima interno en el Sporting tiene esta semana una alta graduación. La idea de una modificación en la dirección deportiva, con el regreso de Eloy Olaya, en sustitución de Emilio de Dios, provocó que Preciado se posicionara con una postura que puede interpretarse como un pulso al Consejo. Ya no es un secreto que en el organigrama interno de la entidad hay dos bando diferenciados. Uno es el del actual director deportivo, que cuenta con el apoyo del entrenador. En el otro está el resto del cuadro técnico, además del Consejo, que es el que toma las decisiones. La relativa a la reestructuración del cuadro técnico está tomada, pendiente de darle forma en el momento que Vega-Arango considere más adecuado, que puede ser en función del mercado invernal.
La relación entre Emilio de Dios y Preciado es íntima, de ahí que el técnico haya calificado al director deportivo de ser la persona más importante del club en los últimos años. En la planta noble se tiene claro que la opinión expuesta por el míster no es por el éxito de los fichajes de los dos últimos años, con sólo dos titulares habituales de los ocho refuerzo. De todas formas, pese al respaldo amistoso del montañés, el análisis del trabajo en la parcela técnica que estudió el Consejo tiene más datos negativos que provocaron que la decisión que se iba a adoptar en mayo se adelante. Incluso podría aplicarse antes de que concluya el año, para iniciar una nueva etapa de planificación con un margen de tiempo para Eloy Olaya, quien ya tiene una idea clara de lo que el club precisa.