Dolor de piernas y control cero

Dolor de piernas y control cero

El Athletic no tuvo control sobre el juego por primera vez en muchos partidos. La presión que hizo el Sporting, el mal estado del césped y la plaga de problemas físicos que arrastra se lo pusieron muy complicado en El Molinón. Fue una lástima que el equipo no supiese dormir el partido hasta que se llevó el susto final, en el que Iraizoz conservó el punto con una mano milagrosa. Preciado acertó llevando el choque a una batalla física y a los leones les temblaron las piernas, con Herrera aún sin ritmo e Iturraspe más obligado a defender que a construir y Muniain boqueando. Se puede hacer la misma lectura que en Mestalla, que se escaparon dos puntos. Pero el empate fue bueno y, como entonces, justo.

Bielsa acertó con el arreglo táctico, obligado por la lesión de Ekiza. Toquero se unió a Susaeta, De Marcos y Aurtenetxe para aportar la intensidad que se necesitaba para llegar vivos al minuto noventa. San José tuvo buenos momentos, David López templó bien su primer balón antes de lesionarse e Ibai Gómez no logró aportar el desahogo por la derecha que le pedía el técnico. El Athletic suma resultados y sigue machacado por los percances físicos.