Benzema y la sombra del Kun

Benzema y la sombra del Kun

El verano fue movido en la planta noble del Bernabéu. La posibilidad de fichar al Kun Agüero estuvo ahí, tan cerca que hubiera bastado un semaforazo en verde de Florentino para ejecutarla. El jugador estaba loco por la música. Ese órdago en las oficinas del Calderón y en su Twitter era para recalar en el Bernabéu, no en el Etihad Stadium de Manchester. Además, Maradona anunció que su yerno "seguirá viviendo en Madrid" y hasta los atléticos aceptaban, entre dolidos y resignados, que su bandera iba a repetir el camino tomado en su día por Hugo Sánchez (eso sí, sin escala siquiera en un equipo-puente).

Pero fichar al Kun obligaba a traspasar a Higuaín o a Benzema. Decisión peliaguda porque ambos son delanteros de talla mundial. De hecho, el Kun es a menudo suplente del Pipita en Argentina y el francés, como demuestra el revelador informe de Míster Chip, lleva números de crack en el escenario que marca la diferencia entre los auténticos genios y los mediocres: la Champions.

M ourinho quiere pitbulls arriba. Higuaín es intocable para él precisamente por eso. Mou recelaba de Benzema hace un año, pero desde la famosa parábola del gato y el perro Karim sacó sus garras y fue cogiendo cuajo de delantero para las grandes noches del Bernabéu. Florentino apostó por él en su día y consideró que era absurdo plantear una guerra institucional con los vecinos atléticos por un jugador que obligaba a sacrificar a una de las tres hojas de su tridente galáctico de 2009: Cristiano, Kaká y Benzema. De momento, el City no se come una rosca en esta Champions (un punto de seis y cero goles del Kun). Yo me quedo con Karim...