China y el Madrid, de la mano

Llegó el Madrid a China y la primera potencia del mundo (lo son ahora los chinos, eso no lo pone en duda ni Obama) se volcó con la llegada del Madrid. El equipo más universal de siempre. Lo fue en su momento gracias a la visión pionera de Santiago Bernabéu (propongo al club que le haga un nuevo homenaje rindiendo culto a su irrepetible figura) y lo es ahora por jugadores como Cristiano, Casillas, Xabi Alonso, Ramos, Özil o Kaká, cuya imagen como futbolistas va más allá de sus cualidades profesionales. Y no olvido que Florentino es un presidente cuya visión empresarial de este deporte le hizo en su día dar un paso adelante del que todavía se siguen recogiendo los frutos. El Madrid es la primera marca futbolística del planeta, pero es bueno cruzar el charco y dejarse ver por China, Estados Unidos y Sumatra, si fuera necesario, para rescatar la ilusión de esos niños que sueñan y visten de blanco.

Es un orgullo ver las caritas de esos críos chinos que ayer disfrutaron con sus ídolos en el clinic organizado por Adidas en el estadio de Guangzhou. Se hace camino al andar y se hace madridismo dejando que los niños toquen y palpen a sus héroes con botas. En un mundo globalizado como el actual es muy importante que en los cinco continentes comprueben que la energía del Madrid por recuperar la hegemonía del fútbol mundial está a la altura de gigantes emergentes como China, muchos de cuyos ciudadanos ya son compatriotas nuestros. Sin ir más lejos, en mi calle vive Ángel, un niño de padres chinos que nació en mi barrio hace cinco años y pega a la pelota de cine. El niño, como debe ser, es del Madrid y sé que hoy verá y devorará con su padre el AS disfrutando con las imágenes que presiden esta página. Felicito al Madrid por su iniciativa. China es blanca y emergente...