Nacido para jugar en el Madrid

A Gonzalo Higuaín le ha costado colgarse el cartel de intransferible en el Real Madrid. Después de estar en el mercado desde junio de 2009, cuando Florentino Pérez reconquistó la presidencia del club de Concha Espina, el Pipita se ha ganado a pulso, gol a gol, su sitio y jerarquía en el equipo. Y lo ha conseguido convirtiéndose en indiscutible para Pellegrini y para Mourinho (hasta su operación de hernia de disco). Higuaín cumple su ambición de jugar y triunfar en el Madrid. El sueño de un niño de once años como se puede comprobar en un vídeo que le grabaron cuando tenía esa edad. En esa grabación, Pipita afirmaba que su sueño era jugar en el Real Madrid (el vídeo lo emitieron hace unos meses en un programa en el que homenajearon a su padre, Jorge Pipa Higuaín, en una televisión argentina).

Cuando fichó no dijo aquello de que había nacido para jugar en el Real Madrid. Ni recordó las ilusiones que albergaba a los once añitos. Se limitó a convencer con su fútbol a los dirigentes que no le habían fichado y se ganó a una afición que le ve como un jugador de los del Madrid de siempre. Un futbolista ganador, con garra, carácter y calidad. El Pipita ya asume su rol y su jerarquía hasta para convencer al Kun Agüero para que se vaya con él al Madrid. No teme su competencia.