El Madrid ya conoce sus carencias
Cuando llegas a una Final Four sólo vale el título como recompensa. Sin embargo, el Real Madrid puede y debe extraer detalles positivos de su presencia en la fiesta final de la Euroliga. Como en alpinismo, la llegada a la cumbre exige la aclimatación progresiva en niveles intermedios. El Madrid es un conjunto repleto de talento, pero todavía sin consolidar. Experiencias así le sirven para conocerse a sí mismo, ir definiendo su personalidad. No debe derrumbarse por la ocasión perdida. Las deducciones a tomar son otras. Primero: que está en el camino correcto. Segundo: analizar las causas de la derrota para reforzar el equipo en los puntos necesarios.
Hay tres carencias básicas en el Madrid actual: triples, contraataques y solidez defensiva en la pintura. Dicho de otro modo: necesitan un fusilero como Jaycee Carroll, un base tipo Omar Cook y un pívot como el mexicano Gustavo Ayón. Sin duda, Lele Molin tiene un problema serio con los bases. Pablo Prigioni dirige bien, pero no corre, y Sergio Rodríguez corre, pero no dirige. Con los cincos, algo similar: Ante Tomic brilla delante pero flojea detrás, al contrario que D'or Fischer. Con todo eso en el bloc de notas, otra urgencia: olvidar pronto la Final Four y volcarse en la Liga.