La mejor medicina
Valentía y riesgo en Mourinho. Era un partido de cara o cruz. Empatar o perder significaba olvidarse del campeonato. Y justo en ese momento decidió darle otra vez la titularidad a Kaká. No descarto que lo hiciera pensando en partidos que no son de Liga. El brasileño, estando al cincuenta por ciento, puede resolver una final, o una eliminatoria. La Copa y la Champions sí necesitan su talento. Pronto corroboró esa teoría con un buen gol, aunque eso hizo que se relajara.
Lo mejor es que esa hora en el campo le habrá servido para reforzar su autoestima. También para que sus compañeros se fíen de él en situaciones extremas, que llegarán. En su debe, cierta precipitación en las paredes al borde del área y las carencias físicas producto de su inactividad. Todos saben que son meses decisivos en su carrera. En junio habrá que tomar una decisión, tras dos campañas que no han justificado su fichaje. Se acortan los plazos, pero los cracks, ya se sabe