A Kaká se le escapa el último tren
Si pudiera retroceder en el tiempo, seguro que no forzaría para jugar el Mundial de Sudáfrica. Aquello le ha costado muy caro. Ahora su carrera está en el aire. Una cosa es recuperarte de una lesión en el quirófano y el gimnasio, y otra hacerlo en el campo. ¿Cuándo volverá el Kaká que fue Balón de Oro? Imposible saberlo. Su situación es angustiosa. Si no juega no puede recuperar el nivel. Y no juega porque hay otros que acaban de llegar y lo hacen de diez. Su posición es la de Özil. En los partidos decisivos, Mourinho no va a dudar: seguirá en el banquillo. Y con los minutos de la basura no se recuperan sensaciones. La falta de ritmo duele mucho más que la rodilla.
Todos están atados de pies y manos. El club no puede amortizar ni la mitad de la inversión, si se pone a vender. La cesión para que recupere sensaciones no se ha contemplado, porque el jugador no la vería con buenos ojos. El técnico quiere ayudarle y hasta arriesgó dándole la titularidad en el partido de Almería, pero aquel atrevimiento se pagó con puntos que pueden costar la Liga. El jugador trabaja sin regatear esfuerzos, pero se desespera viendo que al final será una temporada en blanco y a su edad eso resulta muy peligroso. No queda otra que esperar a junio.