Rako contra el mundo: su ideal
La aldea global que es el baloncesto nos trae a viejos conocidos con pasado madridista y que dejaron huella muy distinta en el recuerdo de los aficionados. El añorado Tunceri y el odiado Rakocevic (limiten el término a lo deportivo) llegan con el Efes Estambul, a las órdenes de otro inolvidable que, si bien nunca estuvo en el Real Madrid, es un hombre legendario en el baloncesto español. Me refiero, claro, a Velimir Perasovic, que tras una modélica trayectoria internacional como jugador, intenta también alcanzar la cúspide como técnico.
Es el típico partido que no se debe perder. Ganar todo en casa y puntuar alguna vez fuera. Son los dos mandamientos de la Euroliga. El Real ya ha sacado un break muy valioso en Siena, de modo que ahora no debe malograrlo. En la primera fase el Efes se mostró inexpugnable en Estambul (allí perdió incluso el Panathinaikos), pero no tan peligroso fuera. El carácter riguroso de Perasovic se refleja en defensa, disciplina y aprovechamiento de las posesiones, pero en ataque casi todo lo focaliza en Igor Rakocevic, que está en su salsa, sin restricciones para disparar. Un gran reto para Llull, Sergi Vidal y Clay Tucker (si se atreve Messina a encargárselo).