El mejor Dakar de Carlos Sainz

Hoy finaliza el mejor Dakar de los últimos años con la victoria de dos pilotos españoles, Marc Coma y Laia Sanz, y el tercer puesto de Carlos Sainz. Ya de por sí éstas son tres buenas razones para ensalzar la carrera de 2011, pero tengo la sensación de que la prueba de este año ha sido superior a las demás, casi irrepetible. Seguramente tenga mucho que ver con estas buenas vibraciones el extraordinario trabajo de Marc Martí y su equipo en Teledeporte, que en sus resúmenes diarios han sabido aprovechar como nadie las magníficas imágenes que les ha facilitado ASO, pero el gran culpable del éxito del Dakar americano de este año ha sido el equipo Volkswagen: su jefe, Kris Nissen y los pilotos Nasser Al Attiyah y Carlos Sainz.

La marca alemana, emulando a Red Bull y a Dietrich Mateschitz, ha prescindido de las órdenes de equipo y ha dejado que la pericia y la valentía de sus pilotos decidan el ganador. Créanme, las órdenes de equipo son tan dañinas para el motor como el doping para el ciclismo y sólo cuando no existen pueden surgir espectáculos como los mundiales de F-1 y MotoGP de 2010 o este Dakar. Pero olvidémonos de la política y saboreemos para siempre la obra de arte que han dibujado en Suramérica Sainz y Al Attiyah. Parecía imposible que una carrera real pudiera superar la espectacularidad de un video juego pero ha ocurrido, y será difícil que vuelva a suceder. Carlos no ha vencido pero se ha ganado un puesto de honor entre los más valientes y los inmortales del motor. Ojalá no sea su última carrera.