El secreto está en ir de la mano
Por historia, el Ayuntamiento y el Sporting casi siempre mantuvieron excelentes relaciones. Incluso era norma que el alcalde formara parte de la directiva del club, norma que se rompió desde la casa consistorial tras las primeras elecciones democráticas de 1977. Si echamos la vista atrás, no pasan inadvertidas las colaboraciones directas con el club. En los 60, el presidente Méndez Cuervo promovió cubrir el campo, poner iluminación artificial y hacer nueva la Tribunona, para lo que le ayudó mucho ser teniente de alcalde del Ayuntamiento. En los últimos tiempos, la ayuda municipal más destacada fue en 1992, cuando Álvarez Areces consumó la transformación del club en SAD y evitó el descenso administrativo con la compra de Mareo y las marcas.
Las relaciones en la actualidad son excelentes. Vega-Arango, con sus formas exquisitas, siempre muestra agradecimiento por los apoyos. Es una fórmula que le da buenos resultados, todo los contrario que a alguno de sus predecesores, que con voces y despilfarros dilapidaron gran parte del patrimonio del club. Santiago Menéndez, principal interlocutor ahora en las negociaciones del Ayuntamiento con el Sporting, descubrió el potencial que puede tener un club de fútbol para una ciudad y no tiene inconveniente en reconocerlo. Está visto que cuando hay una unión entre el club y el consistorio las cosas van mejor para todos, sin olvidar el apoyo del Principado, también conveniente y necesario. Sabe que ir de la mano y seguir en Primera es la forma de estar en el mundo.