Hay que mimar a la cantera

La cantera es el mejor patrimonio que tiene el Atlético pensando en el futuro. Amorrortu llegó por la puerta de atrás y la realidad es que ha hecho una labor más que sobresaliente. Primero Fernando Torres y ahora De Gea han sido y son los dos jugadores que más han entusiasmado al Vicente Calderón. Además, en la recámara hay gente como Borja, Pulido, Koke, Keko o Rubén Pérez que prometen emociones fuertes. A falta de euros para poder aspirar a galácticos, la intención que tiene el Consejo es que al menos ocho jugadores de la primera plantilla hayan salido de la secciones inferiores. Me parece buena política y la mejor manera para volver a estar luchando por los primeros puestos. Por desgracia, los colchoneros han sufrido en sus carnes bacaladas infumables como las de Maguy o viejas glorias que buscaban su retiro dorado en el Manzanares como Seitaridis y Maniche. Al final esto provocaba enfado y un equipo que estaba a la deriva. Para ello, es importantísimo la labor de la escuela y, sobre todo, los conciertos de colaboración que se hacen con diversos conjuntos de base que permiten tener controlado a lo más florido de los críos que juegan al fútbol en Madrid.

Amorrortu tiene las ideas claras y ha sido educado en Lezama, el santuario del Athletic que tanta envidia despierta en España por los jugadores míticos que ha dado. La respuesta de la afición encomiable. Prefieren gente que tenga sangre atlética en sus venas a cualquier producto que se antoja incomible. Bajo estos parámetros, el Atlético del pasado hizo cosas más que importantes y por supuesto no se olvida la labor de El Niño que supo tirar de la entidad cuando estuvo en el infierno de segunda.