Si Allegri triunfa, la ONU es suya

Pato, Robinho, Ibrahimovic y Ronaldinho en la misma foto ofrecen una composición galáctica a la altura del Florentino más lujoso. Berlusconi ha tomado una autopista de alta velocidad para rehabilitar su figura. Ante el pueblo él queda ya libre de culpa. El marrón bañado en oro le cae a Allegri, ex jugador modesto y ex entrenador de modestos. Si sobrevive a este vestuario no se me ocurre mejor candidato a secretario general de la ONU.

Porque Ibrahimovic es un jugador fabuloso que desplantó a Mourinho y a Guardiola. Debe resultar realmente grave el problema de convivencia que genera un futbolista como para que el Barça le malvenda por una tercera parte de lo que pagó por él hace un año sin que su rendimiento deportivo haya sido escandalosamente negativo. Robinho no le sirvió al Madrid, ni a Hughes, ni a Mancini. Un jugador de su categoría y de su salario no puede malgastar lo mejor de su carrera jugando cedido en la Liga brasileña. Ronaldinho le puso sonrisa al Barça al principio y sonrojantes michelines al final. Y al grupo se ha sumado Boateng, aquel ghanés que lesionó a Ballack y que no se habla con su hermano alemán. A esto se enfrentará el Madrid: talento servido en salsa picante. Lo imprevisible siempre tiene peligro.