Antes Godín que el lateral Fanni

Antes Godín que el lateral Fanni

El orden de prioridades del Atlético no es un lateral derecho. O por lo menos no lo es para García Pitarch, el que ficha, que tiempo ha tenido para traer a uno desde que se fue Heitinga. No se ha dado prisa porque con Fanni, ese que viene al Calderón cada veinte días, lleva negociando dos años. Los males del Atlético atrás no están en flanco derecho, donde Ujfalusi convenció la pasada temporada, sino en el centro de la defensa, por donde ha tenido demasiadas vías de escape de agua. Los aficionados, y el propio Quique, se han llevado muchas veces las manos a la cabeza por esos centros cruzados que tanto daño hacían y por lo mal que se defendía en el segundo palo. Muchos goles llegaron así y algunos puntos se perdieron por esa causa.

Godín es un recio defensa, con la experiencia de los 43 partidos que da llevar la zamarra charrúa. Bueno en el juego aéreo y contundente en los marcajes, seguro que haría recordar a implacables zagueros sudamericanos que dejaron huella en el Atlético, como Griffa, Ovejero, Benegas... El uruguayo no es de los que se arruga como no lo eran aquellos centrales. Que venga Godín, de veinticuatro años, no debe significar que se le cierre la puerta a Pulido, un central por el que hay que apostar, si de verdad en el Atlético se cree en la cantera. Pero que sea por convencimiento. O sea, que Pitarch también debería trabajar en dar salida a los jugadores que sobran para hacer sitio a los que llegan. Pero antes un central, Godín, que un lateral, Fanni.