¡Viva la madre que os parió!

¡Viva la madre que os parió!

Se me acumulan las emociones. Poco puedo hablar del partido salvo que mi corazón colchonero es capaz de resistir cualquier cosa. Lo mejor ha sido a la conclusión del partido. Madrid entero ha explotado con los dos goles de Forlán. San Isidro nos lo debía desde Bruselas y ayudó al uruguayo en sus tantos. Neptuno es una fiesta y eso es imborrable. Hasta la llamada de mi hija gritando de alegría se la tengo que agradecer a Forlán y Agüero por su fe en la jugada del gol. La noche fue larga y hoy la fiesta promete. Han sido muchos años de estar en la penumbra. Los atléticos somos únicos y hay que agradecer hasta los detalles de hermandad del Real Madrid (gracias Roncero), que hemos recibido por el título.

A De Gea no le bajaré nunca de los altares. El hambre de Forlán ha sido la clave de esta Europa League ya que todos los goles decisivos han llevado su firma. Quique nos ha devuelto la ilusión y el abrazo entre el Príncipe y Cerezo es el agradecimiento de toda España a un club que ha vuelto por el camino que nunca debió abandonar. ¡Viva la madre que os parió colchoneros! Sois únicos. El triunfo es vuestro. Los chavales de 15 años ya saben por qué somos del Atlético. Por noches de tanta felicidad como esta.