Del Puerto y Rodríguez, los fichajes

Es una pena el espectáculo lamentable que ofrece el Xerez fuera del césped. Federico Souza está metido en un callejón sin salida. No está bien aconsejado ni por sus asesores mercantiles, que no conocen ni el mundo del fútbol ni el derecho español, ni por sus asesores futbolísticos. Alustiza y Vigneri son el ejemplo. Souza ha mentido para escurrir el bulto, pero como aquí en Jerez tenemos una máster en embusteros, la verdad se conoció por boca de los administradores concursales. No hay plan de viabilidad de Souza. Ni lo ha habido. ¿Y quién sabe si lo habrá?

Últimamente se ha puesto de moda atacar a los administradores concursales. En este sainete llamado Xerez Club Deportivo en el que los magnates se convierten en mangantes, hemos sufrido a los infaustos Oliver, Gil Silgado o Morales. Y entre tanta ruina surgen los administradores, los únicos profesionales con un interés real por reflotar al Xerez. No me gusta Souza, pero menos Morales. Nuestro futuro pasa por los administradores y la mano de hierro de la jueza Nuria Orellana. Eso y lo que ocurra en el césped, donde Gorosito nos ha devuelto la dignidad. Una pena que se vaya. Como se irán Souza, Lussenhoff, Morales, Ziganda, Monterrubio, Rondán, Alustiza, Bermejo... Al final sólo quedará el Xerez. Y cuanto mejor hagan su trabajo los administradores, mejor salud tendrá el club en el futuro. Por eso en Chapín alentemos a Bermejo y compañía, y en los despachos, a Rodríguez y Del Puerto. O sea, al Xerez.