Contar con la presencia de Santana en el AS es un honor. Santana es uno de los personajes que han escrito la historia del deporte español. Santana es al tenis lo que Bahamontes al ciclismo, Nieto a las motos, Ballesteros al golf o, en tiempos más cercanos, Alonso a la Fórmula 1. Más aún diría. Porque no sólo fue quien lo popularizó, sino quien nos lo dio a conocer. Pongo el caso de Alonso, porque igual que gracias a él hemos ido preguntado qué era eso del pit lane, los slicks, el drive trough o el stop and go, con Santana nos sucedió algo parecido cuando no entendíamos porqué los tantos se contaban de quince en quince y luego del treinta se pasaba al cuarenta y después, en caso de empate, al deuce (eso no se traducía y pronunciábamos yus).

Pues de no tener ni idea hemos pasado a tener un gran torneo en Madrid, segundo en rango de cuantos se celebran en el mundo. Primero están los cuatro del Grand Slam y, a continuación, los Masters 1.000 en categoría masculina y femenina. Santana es el director de nuestro torneo. Un torneo que funciona, que ha ido a más hasta el extremo de construir el ayuntamiento una gran instalación específica para el tenis, y que provoca la reventa los últimos días. No hay muchos deportes en España que despierten tal expectación. Y como Santana fue quien puso la primera piedra para que el tenis sea para nosotros lo que es ahora, justo es reconocérselo. Por eso ayer nos sentimos honrados con su visita para trasladársela a todos ustedes.